domingo, 12 de febrero de 2012

Individualidad


Seguro que todos alguna vez se preguntaron cómo serían de grandes y qué clase de persona llegarían a ser. En mi caso muchas veces lo pensé, de hecho, creí que sería millones de personas; colmada de admirables y distinguidas cualidades que se notarían incluso desde una esquina a otra junto al semáforo cruzando al metro. 

A medida que fue pasando el tiempo, esas millones de personas se fueron reduciendo cada vez más hasta llegar a una sola: la persona que realmente soy. 

La persona que soy ahora debo decir que me enorgullece, sin embargo no es lo que esperaba; esperaba hacer grandes cosas, quizás ya las he hecho y aún no lo he notado o sólo quizás esperaba demasiado. 

La persona que soy ahora tiene grandes cualidades, más de las que solía imaginar. Sólo que éstas no son vistas desde una esquina a otra como supuse que serían, sino que son vistas después de unos segundos, a veces minutos, o unas cuantas horas, incluso días  y si NO tengo suerte años.

Segundos, si logró sujetar la puerta de la farmacia a la ancianita que viene detrás siguiendo el paso; minutos, si platico con un niño de apenas cuatro años mientras tomo una o dos libretas de Casa&Ideas; horas, si me encuentro en una junta de amigos charlando, escuchando, opinando y compartiendo. Días, si conocen mi modo de hablar, oír, mirar, pensar, reír y sentir. Años, si conocen lo que escribo, lo que cocino, lo que leo,  que película ciertamente escogeré para arrendar, que película ciertamente NO escogería nunca para arrendar, mi música favorita, mis lugares favoritos, mis tiendas favoritas, mi risa falsa, mis ojos falsos, mi cara falsa, mis mayores miedos, cuando algo me asusta, cuando algo me colapsa, cuando tengo hiperventilación, cuando no quiero nada, cuando lo quiero todo, cuando tengo pena, cuando estoy feliz y no finjo estarlo, cuando quiero estar acompañada, cuando quiero estar sola, cuando quiero sentir los pies en la arena y mojarlos en el mar, o simplemente mojarme entera...



minutos. horas, días, años.... 

es lo que toma realmente conocer a una persona .



 Cami

2 comentarios:

  1. Yo al igual que vos, me vivo preguntando en como voy a ser. Y creo, que como soy ahora. Se que muchas cosas me van hacer cambiar en algun aspecto de mi personalidad y ojala sean para bien. Pero siempre estara nuestra escencia y es lo que no hay que perder, ni en minutos, horas, dias o años. Besitos, me encantó tu entrada :)

    ResponderEliminar
  2. Como vos, tambien estoy preguntandome todo el tiempo como voy a ser cuando sea mas grande, si voy a triunfar, o todo lo contrario. Muchas cosas van a cambiar, pero la persona siempre va a ser la misma. Nunca se termina de conocer a una persona, como vos decis... es triste.
    Gran entrada, me encanta. Gracias por pasar linda. Te dejo muchos besos ♥

    ResponderEliminar

Well, cada comentario hace lo suyo, cada comentario nutre en cierta forma éste blog, ¿por qué no alimentarlo más?